Los bizcochos son deliciosos en cualquiera de sus versiones y admiten una infinidad de combinaciones que los hace diferentes y espectaculares!! Hoy vamos con un bizcocho de verano… porque hemos utilizado fruta de verano para realizarlo y el resultado fue magnífico!! Suave, avainillado, esponjoso, jugoso y con el toque perfecto de las frutas que lo hace irresistible a la vista y al paladar.

INGREDIENTES:
140 gr de harina de repostería
1 cucharita de levadura
1 pizca de sal
70 ml de aceite de girasol
100 ml de buttermilk
130 gr de azúcar blanca
1 cucharadita de azúcar avainillado
1 cucharilla de esencia de vainilla (opcional)
2 huevos grandes (o 3 medianos)
Fruta de verano variada : 2 ciruelas rojas, 2 melocotones, 1 fresquilla, 1 paraguaya
Azúcar glass para decorar
Almíbar:
200 ml agua
100gr de azúcar
1 cucharadita azúcar avainillado
PROCEDIMIENTO
Batimos los huevos, añadimos el azúcar, batimos y a continuación agregamos el aceite, mezclamos.
Añadimos la levadura a la harina y echamos poco a poco a la mezcla de los huevos, el azúcar y el aceite.
Precalentamos el horno a 180°c.
Engrasamos y enharinamos un molde y vertemos la masa en el.
Colocaremos la fruta en la superficie lo más bonito que podamos, nosotros hicimos una rosa que quedó preciosa.
Metemos en el horno en la bandeja 45 minutos aproximadamente y le pondremos la rejilla con papel albal por encima para evitar que se queme.
Estará hecho cuando se meta un palito y salga limpio.
Se saca y se deja enfriar sobre una rejilla.
Mientras se enfría prepararemos un almíbar mezclando la vainilla, agua y azúcar y dejando hierva por 5 min. Lo dejaremos templar y echaremos por la superficie con una brocha o una cuchara.
Dejaremos enfriar por completo a que absorba el almíbar y lo pondremos en la fuente de presentación espolvoreado con azúcar glass.

Una receta muy sencilla, de aprovechamiento de fruta que se esté poniendo muy madura. Dan ganas de comerlo, no?
